Preguntas Frecuentes

No es saludable dar alimento para perro a nuestros gatos ya que sus requerimientos nutricionales son totalmente distintos y esto puede acarrearle severos problemas de salud. En el caso de la comida casera se corre el riesgo de omitir nutrientes esenciales para su organismo; no obstante, esta puede ser una opción siempre y cuando cuente con la asesoría de su veterinario o nutricionista para establecer una dieta que incorpore los requerimientos nutricionales adecuados para su gato.
Lo más recomendable es proveerle alimentación balanceada de fabricación industrial que posee los aminoácidos, vitaminas y minerales necesarios alternando de vez en cuando con alimento húmedo en lata.

La leche no es necesaria y aunque algunos gatos parecen tolerar un poco la leche, otros no. Los gatos carecen de la enzima lactasa, la cual desdobla a la lactosa en glucosa para ser absorbida por el tracto intestinal; su carencia hace que la leche permanezca sin digerir, aumentando la cantidad de gases y generando cólicos y casos de diarrea.
Lo que sí es conveniente es darles agua fresca varias veces al día para mantenerlos bien hidratados.

La esterilización en gatos se hace hacia los 6 o 7 meses de vida, cuando es menos probable que afecte negativamente su crecimiento. La castración no tiene ningún efecto perjudicial demostrado en la salud de los gatos. Por el contrario, en las gatas se elimina la ansiedad de la época de celo y los embarazos que aumentan la cantidad de animales, con cargas adicionales para los dueños; en los machos, disminuye el comportamiento agresivo y dominante que suponen las peleas con otros gatos por el territorio o la ansiedad ante gatas en celo.

Sí, pero con una frecuencia menor que la de un perro, cada 20 o 30 días, eso incluiría el corte de uñas y el cepillado del pelo para eliminar suciedad, deshacer nudos y promover el crecimiento del mismo. Aunque los gatos no son amantes del agua si los baña desde pequeños se adaptarán más fácilmente a esta rutina y probablemente hasta lo disfruten.

Sí. Los gatos son animales muy inteligentes. Su entrenamiento no es igual que el de los perros porque son sumamente independientes, incluso solitarios, y el principal problema es la forma de lograr captar su atención. Es mejor que no se sientan observados y dejar que sean ellos quienes decidan acercarse, ése será el momento ideal para el entrenamiento.
Si hace algo mal debe reñirlo en el momento y utilizar la misma expresión siempre que haga algo indebido, sin excepciones. Y es muy importante que lo premie cuando hace algo bien: tenga en cuenta que los gatos se mueven por recompensas.